El amor y el interés se fueron al campo un día…

Debo confesar que no me gusta ver televisión, de hecho, los últimos doce años, el televisor de mi casa era simplemente un objeto decorativo, que se encendía solamente para saber los resultados de alguna elección en mi país o cuando iban los amigos de mis hijos a jugar con el Xbox. Nunca contraté un servicio de televisión satelital pues no me parecía necesario, considerando que por internet podía ver lo mismo, sin comerciales y pausarlo cuando quisiera.

Sin embargo, al llegar a Costa Rica, la promoción del servicio de internet venía con el paquete de canales de tv, y considerando que estaba por empezar la temporada de Juego de Tronos, pues me convencieron de volver a sentarme frente al televisor.
 

Entre todos los programas de la cadena Discovery, hay uno que es el que generó este artículo. Se llama “Todo en 90 días”. Es un Reality Show de la cadena TLC que cuenta la historia de varias personas cuya pareja vive fuera de Estados Unidos y piden una visa matrimonial para ingresar a ese país. Tienen entonces 90 días para casarse. Si al terminar el período no se han casado, la persona debe abandonar los Estados Unidos. El año pasado había visto un par de capítulos y me había parecido un poco soso y aburrido, por lo que cambiaba de canal o lo apagaba cuando empezaba la serie.
 

     Sin embargo, hace como mes y medio comenzó la cuarta temporada (se terminó en el 2016 aunque el  canal la promocionaba como “nueva”). Me entró curiosidad y debo decir que me atrapó, pero no todas las parejas en sí, sino una en particular: Jorge y Anfisa, quienes se convirtieron en la inspiración para este artículo. Si quieres ver la serie, te recomiendo no seguir leyendo ya que de aquí en adelante hay Spoilers.
 

Jorge, de 26 años (nombre ficticio según estuve averiguando en internet) es un tipo que cultiva marihuana con fines medicinales en Estados Unidos, lo que lo convierte en un negocio legal y sumamente lucrativo. 

Anfisa es una linda chica rusa de 20 años que quiere ser modelo. Su cuerpo muestra claramente la inversión que ha hecho que, desde mi punto de vista, algunas no hacían falta, como la inyección en los labios, pienso que la deformó. En fin, eso no viene al caso. Según se va conociendo la relación a lo largo del programa, al parecer ellos se conocieron por Facebook, pues él quedo maravillado por algunas fotos muy sexys de Anfisa. Después de mucha insistencia por parte de él y varios rechazos por parte de ella, la chica aceptó y él viajó para conocerla, llevándosela luego a unas costosas vacaciones por Europa. Después de eso, Anfisa viaja a Estados Unidos con la visa matrimonial y tiene 90 días para conocer mejor a Jorge y casarse.
 

Ya desde que comienza el programa le tienes rabia a Anfisa. Ella muestra claramente lo que quiere y se molesta cuando no lo tiene. Jorge muestra mucho interés en complacerla, sin embargo, al llegar la hora de desembolsillar el dinero, siempre termina echándose para atrás. Estoy casi segura que el 99,9% de la audiencia llegamos a odiar el descaro de Anfisa, y nos molestaba la sumisión de Jorge, por no querer aceptar que ella solo estaba con él por su dinero. En mi casa, lo que decíamos después de cada capítulo era “¡Yo la mando a Rusia!”.
 

Y como si se tratara de un canal de mi país, cuando el programa se ponía más interesante, el día que correspondía el siguiente capítulo decidieron transmitir “La historia de Nick”, y todos nos quedamos en shock. ¿Qué paso? ¿Un error en la programación? ¿Nos van a dejar en el limbo???. Pues sí, después de esperar dos semanas nos dimos cuenta que no iban a continuar presentando el resto de la temporada. Ahí fue que buscamos información por internet y pudimos ver los capítulos que restaban.
 

Y a pesar de que yo le tenía mucha rabia al descaro de Anfisa, esas dos semanas me dio tiempo para romper esa burbuja y darme cuenta de que ahí el manipulador era Jorge. No… no me golpee la cabeza esta mañana mientras me bañaba y perdí la razón, y tampoco apoyo la actitud de Anfisa, pero vamos a analizarlo de manera más objetiva.
 

Desde que comenzó el programa, Anfisa decía que Jorge le había prometido darle todo lo que ella quisiera. Incluso, en aquellas vacaciones, Jorge no escatimó en gastos y pagó todos los antojos de ella. Él le prometió casarse, vivir en la casa de sus sueños, tener la boda de sus sueños y desde un principio él le dijo que ella no tendría que trabajar pues él se encargaría de cuidarla y complacerla. ¿Cuál fue el error de ella? Tomarse ese ofrecimiento literalmente. Aparte, en las vacaciones donde estuvieron juntos, él le demostró a ella que podía pagarle cualquier antojo, no importa cuánto dinero costara.
 

Durante todo el programa se lo muestra a él como un tipo que solo piensa en “el amor”, que intenta que sus hermanas acepten a la novia y que él se desvive por comprender las actitudes de Anfisa y de complacerla en todo. Pero… ¿Cuál es la realidad? Pues que él nunca cumplió lo que le prometió. Desde que ella llegó a Estados Unidos ellos vivían en un hotel, y por la presión de ella es que se mudaron a un departamento. Ella se antojó de un bolso de 10 mil dólares, él no se lo compró, ellos fueron a ver los anillos de compromiso, él quería uno de 40 a 70 mil dólares, ella quería el de 300 mil, sin embargo, no le compró ninguno y terminó yendo él solo a comprarle uno por 10 mil en uno de los capítulos tras una discusión. Ella le pidió una mesada de 10 mil y el casi cae en shock y ella responde que fue comprensiva porque ha podido pedirle 1 millón al mes. La mesada tampoco se la da, y al final, la boda fue una simple ceremonia en el juzgado donde solo estaban ellos y el equipo de grabación, ni siquiera la camioneta donde llegaron al sitio tenía un simple lazo, al contrario, tenían materiales de trabajo dentro.
 

Entonces, ¿quién salió ganando en todo esto? Pues obviamente Jorge, porque durante todo el programa se lo muestra como un chico bueno, pasado de kilos que sacrifica todo por darle gusto a esa “mala mujer” que el ama con locura pero que ella solo quiere su dinero. Una de las escenas claves de la serie fue después de que fueron a comprar el vestido de novia. Ella pidió de una vez el vestido más caro que costaba unos 45 mil dólares. Después de discutirlo salieron de la tienda sin comprar nada. Cabe acotar que al final ella se casó con un vestidito que desde mi punto de vista no debía pasar los 300 dólares. 

Bueno, el caso es que se van a un restaurant y ahí es cuando él le pregunta “¿Tú estás conmigo por mi dinero?” a lo que ella responde muy calmada “Si”. En mi casa los comentarios eran algo como: “Muchacho ridículo, ¿es que no te has dado cuenta en todo este tiempo que ella solo quiere tu dinero?, ¡yo la mando en ese momento para Rusia!”. Después de una pausa comercial (en la que despellejamos viva a Anfisa), vuelven a poner la escena (como para reforzar el dedo en la llaga) y Anfisa muy calmada le dice “¿Si yo fuera una mujer fea y gorda, tu estarías conmigo?” TOUCHÉ
 

Jorge no sólo evade la pregunta, sino que manipula la situación con el tema del amor, el matrimonio, etc. Y ella vuelve a repetir “tú me dijiste que me darías todo lo que yo quisiera y por eso vine, si no consigo lo que quiero me regreso a Rusia”.

Como verán, desde un principio ella siempre fue sincera y repitió hasta el cansancio que él le prometió darle lo que ella quisiera. Menos mal que no se le antojó la Luna, aunque igual que todo lo demás, Jorge no se la habría dado.

Obviando la parte explosiva y malcriada de Anfisa (q en ocasiones provoca arrancarle la cabeza), la que fue utilizada fue ella. Jorge mintió desde un principio (y él lo admite en una entrevista al finalizar la serie). Él le hizo ver a ella en aquellas vacaciones que él tenía todo el dinero del mundo y que podía cumplirle cualquier capricho. Desde un principio la relación se basó en el dinero y él sabía perfectamente lo que estaba ofreciendo. Ella no lo engañó haciéndole creer que lo quería para después pedirle cosas, ella directamente le pedía cosas sin decirle que lo quería y todas las veces en las que él le preguntó si lo quería por su dinero, ella le respondió tan claro como el agua “Sí”, problema de él (y de los televidentes) que no quisimos escuchar.

¿Cuál era el interés principal en este caso? ¿El dinero? No… el interés en este caso era el de Jorge, de tener a su lado una mujer joven, hermosa, manipulable e inmadura. Si Anfisa fuera una profesional, o una mujer más madura mentalmente, la historia habría sido diferente. Él obtuvo lo que quiso, casarse con una mujer bella bajo una fachada de hombre rico y lo mejor, la tuvo sin invertir mucho dinero. Incluso, en la ultima entrevista al final de la temporada ella lo enfrenta y lo desenmascara diciendole: "Tu dices que estoy contigo por tu dinero y todos me juzgan por eso, ¿pero acaso tu te acercaste a mi y me insististe por mi inteligencia o mi manera de pensar? Tu solo hablabas de mis fotos, tu mentiste diciendo que eras rico para que yo te prestara atención porque sólo querias mi cuerpo" A lo que Jorge respondió que si....

Cuando hablamos de amor e interés, siempre pensamos que el interés está representado por el dinero, sin embargo, debemos empezar a agregarle sinónimos y asociarlo a todo aquello que genere alguna ganancia. Ya el amor en si es una especie de "negociación”. Se espera que por dar amor se debe recibir amor, si hay respeto, se debe recibir respeto, es un intercambio equitativo. El problema reside cuando se da amor y se recibe otra cosa. Es por eso q la mezcla de amor por dinero es mal visto, porque son dos cosas diferentes. En este caso, Anfisa daba su compañía y atributos físicos a cambio de una vida llena de comodidades y Jorge respondió al anuncio con una oferta engañosa.

Esto no sólo pasa en las relaciones amorosas, pasa en el trabajo, pasa con los amigos, hasta con la familia. Cuantas veces hemos escuchado la frase “quédate con aquellos que están contigo en los malos momentos, porque en los buenos están todos” ¿De qué hablamos? De lo mismo, de interés. De aquellas personas que están contigo solo porque tienes vehículo, o tienes contactos, o eres el trampolín para algún trabajo, o tienes su misma clase social, o puede compartir tu circulo de amigos, o simplemente le generas un beneficio. Y si todo eso es así, ¿que ganas tu a cambio? Piénsalo.

La historia de Anfisa y Jorge es simplemente la historia romántica del cazador cazado.

¿Y tú? ¿Qué opinas? ¿Quién usó a quien?

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¡Besos!!!!

¿Quieres saber qué pasó con esta pareja? entonces sigue la historia haciendo clic aquí

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